CERDO IBÉRICO

La carne de cerdo ibérico cuenta con una gran cantidad de grasa infiltrada o veteada, que le aporta mayor jugosidad a la carne. Esta grasa ayuda a reducir el colesterol malo, aumentando el colesterol bueno, es alta en proteínas y aporta vitaminas del grupo B y minerales tan importantes como el hierro, magnesio, potasio, fósforo y zinc, necesarios para el correcto funcionamiento de nuestro organismo.